[A LA CARTA] Restaurant italo-peruano ‘il Capriccio Limeño’: Lo mejor de dos ricas culturas gastronómicas

'Il Capricio Limeño'.

‘Il Capricio Limeño’.

En pleno corazón de Macul y haciéndose espacio entre los comercios de la principal avenida del lugar, este sencillo pero acogedor comedor gourmet es una alternativa a considerar a la hora de probar nuevos estilos, con amplias probabilidades de retirarse satisfecho con una gran sonrisa.

Por Christian Reyes P.
Twitter: @Buyinski

Nada mejor que darse el gusto de vez en cuando recurriendo a las pastas y lo mejor de la cocina italiana, con toda su frescura de ingredientes caseros y atendido como debe ser. Pero, ¿y si a esta oferta se agrega el sabor inigualable de la cocina peruana, tan de moda los últimos años? Esa es la propuesta de ‘Il Capriccio Limeño’, en pleno corazón de Macul.

En cualquiera de sus horarios, el local logra hacerse espacio en Avenida José Pedro Alessandri (Macul) e igualmente en lo gastronómico conquista su lugar como una alternativa diferente y bien lograda mezclando lo mejor de interesantes sabores que consigue complementar. Parte del secreto está en la experticia de su chef, Jesús Muñoz, de reconocida trayectoria en diferentes y consolidados establecimientos capitalinos y que sin duda pone su toque en el abanico de posibilidades que ofrece la carta.

En lo físico, aunque el restaurant con aires de emporio se ve pequeño, se debe sumar la terraza y dependiendo de la distribución del espacio interior, da como resultado un ambiente tan íntimo como agradable especialmente cuando la afluencia es regular, pudiendo apreciarse por parte de la clientela la preparación de los platillos en la cocina adjunta.

Acerca de la apreciación de los comensales, si bien las opiniones en la red e in situ se dividen, en parte esto se debe a los problemas en la toma de los pedidos, donde los garzones –especialmente los más novatos- extreman sus recursos pero no alcanzan a tomar nota correctamente de las solicitudes de las mesas, lo que mueve a la consiguiente equivocación y el error en los platillos. Sigue leyendo