[COLUMNA] «El costo de la impunidad»

ossesLa derrota de San Marcos de Arica en las alturas de Calama ante Cobreloa podría no ser sorpresiva y quedar como una mera estadística en los libros del fútbol chileno, pero una vez más, una decisión arbitral errónea marcó el resultado final.

Era el último minuto de partido cuando Enrique Osses, que venía de cumplir una sanción precisamente por un arbitraje deplorable en Rancagua, vio penal donde lo que correspondía era pasar por alto un piscinazo de un jugador loíno o en su defecto, amonestarlo por exagerar un roce propio del juego.

La resolución del hecho es historia: Expulsión para el ariqueño Augusto Barrios, quien se salió de sus casillas ante el cobro, penal y posterior gol para el moribundo equipo que dirige Marco Antonio Figueroa, pérdida de los puntos para el santo y la caída del último invicto.

Como nunca hubo consenso en que -textual- «Osses compró un elefante dentro de un bazar», en alusión a que vio lo que nadie más notó o simplemente, pitó lo que quiso.

Aunque es poco probable -dicen- que entrara condicionado por los lloriqueos del «fantasma» entre semana, victimizándose ante los arbitrajes, a Enrique Osses -nuestra cara referil ante cualquier evento de índole internacional- lo más seguro es que le aguarde una nueva sanción completando un inicio de temporada para el olvido.

Pero ¿sirven estas vacaciones forzadas? La suspensión de dirigir partidos de la serie de honor para un juez, en ningún caso -como le ocurre a San Marcos- significarán una restitución del punto que dejó ir en el último compromiso en momentos cuando cada unidad es clave tanto para seguir soñando con el campeonato como para acumular números con miras al descenso

Osses volverá luego y el daño ya está hecho. Su forzado retiro para analizar sus fallos no sirvió de nada. Algunos especulan que viajar al norte sale no resulta muy a cuenta de los clubes, el CDF o la misma ANFP, pero eso ya es otra historia. Sabemos que en Chile, los fondos de la televisión se reparten entre tres clubes, independiente si terminan últimos o primeros y eso es una aberración, ya que debiera premiarse la posición en la tabla.

Sobre los arbitrajes, esos que en Arica suelen rondar los 6, 7 u 8 minutos de adición, cuando en la capital no pasan de los 4, se seguirá comentando. Es de esperar que el siguiente rezongo al menos sea algo parecido a: «Por lo menos ahora nos tocó a nosotros». Seguiremos esperando, porque como siempre, las soluciones en los extremos del país, tardan en llegar.

[COLUMNA] Que sigan las sonrisas

leo-ramosLa apuesta era por los laureles y millones de dólares que tenía el plantel de dueño de casa. Qué cuántos goles se marcarían contra el débil visitante, un reencuentro soñado con una hinchada que repletó el estadio, preparándose para Copa Libertadores, nueva indumentaria y debut de millonario sponsor, etc. Nada de eso le importó a un puñado de profesionales que actuó como tal y llevó alegría al oasis de la puerta norte de Chile. El Santo evangelizó al Cacique en su propia ruca.

Porque a diferencia de todos los equipos profesionales de fútbol del Norte Grande del país, las poderosas empresas mineras no subvencionan a este club que desde sus inicios debe batírselas por si mismo y su gente; amable, cordial, hacendosa. El ariqueño sabe que el equipo de sus amores es modesto pero que ante todo, brinda batalla donde sea y contra quien sea para defender el emblema del morro, que desde el nacimiento, marca mucho más que un peñón de roca sino que es una inspiración de vida para quienes crecieron al alero de la ciudad de la eterna primavera.

El campeonato pasado ante Audax Italiano, apenas semanas antes, la falta de chispa era impresionante desde las tribunas de La Florida. Ni siquiera el capitán Carrizo ordenaba y motivaba a los suyos y conforme avanzaban las líneas en el campo de juego la descordinación era total.

Hoy el momento parece ser distinto. Fernando Vergara partió con el pie derecho, qué duda cabe, pero apenas lleva una semana como director técnico de la celeste. Los Bravos sintieron -y cómo no- la salida de un buen profesor como Fernando Díaz, pero donde la relación con la dirigencia sumado a la baja de rendimiento general y en especial de algunos refuerzos, llevaron a una salida traumática del estratega.

La meta para permanecer en primera ya es difícil, pero proyectar metas a mediano y largo plazo parece serlo aún más. Tenemos buenos elementos de cantera, quizás no tan prolíficos como Iquique en cuanto a referencias cercanas, bien por ellos, pero somos bastante más acogedores con quienes se brindan por el orgullo de los nuestros.

El gol del ex Deportivo Armenio, Leo Ramos en el arco sur del Monumental es un hito sólo comparable a los ascensos del santo en las últimas temporadas. Permite ilusionarse, sonreír y motiva para el trabajo que queda por delante, cuya tarea es bastante dura.

Es de esperar que los liderazgos no decaigan, que los talentos fluyan y que quienes se mantenían con un perfil bajo se destapen. Todos los ariqueños de corazón lo esperamos y queremos que ese bello rincón del Pacífico y su esforzada gente, vuelvan a sonreír, todo cuanto sea posible.

[DEPORTES] La penosa despedida 2014 del santo

smarcos1

Ahi estamos, se gane o se pierda.

Lo vivido en el Bicentenario de La Florida para el último partido del Apertura 2014-15 ya es comentario unánime en redes sociales de parte de la hinchada del santo y el calificativo uno solo: Penoso.

Lo que vimos desde la galería nos dejó perplejos. No solo se perdió 0-3, fue penoso ver el estado anímico de varios jugadores ¡hasta nuestro capitán Pedro Carrizo ni siquiera gritó a la defensa! fue realmente raro todo.

Carlos Labrín mostró un nivel penoso, Oyarzún y Barrios con una inocencia amateur y un «Motta» González que justificó su ingreso tarde porque mostró «que todo le daba lo mismo».

El estado psicológico debe estar muy golpeado porque Kevin Harbottle, el Nico Medina y otros, no tenían fe en el destino de las pelotas que pasaban por sus pies.

Al D.T. Kenny Mamani lo queremos porque es de la zona pero el nivel para manejar un plantel de primera queda muy al debe. ¿Un ejemplo? Imperdonable dejar a un jugadorazo como Renato González en la banca medio partido, inconcebible.

¿El referente de área? Buen viaje para Rentería. Tiene ganas pero como jugador profesional es muy discreto y a ratos aunque les moleste a varios, habla más de lo que juega. Hoy recibió amarilla por reclamar siendo que va a la refriega constantemente y esa es su característica. En la asertividad de pases, nefasto.

En general el nivel fue realmente desalentador en la despedida del torneo, sólo queda ponerse a la fila de quienes esperan repuntar el 2015, toda la fe y ahí estaremos porque cuando vamos al estadio no sólo vamos a ver un partido de fútbol.

Para dolor de los que fuimos al estadio, los goles de Bryan Carrasco (penal) 21´, Felipe Mora 38´, Diego Valdes 58´ nos recuerdan que hay rivales así de cohesionados que pelearán punto a punto con nosotros por quedarse en primera.

{#FotologStyle} Sufriendo con el santo

smaNo hay caso, de nuevo San Marcos como contra la Católica, la U y ahora Wanderers, tiene la mesa servida para llevarse puntos junto al morro y al final, nada.

Jugamos decente, hacemos méritos pero no hay forma de sumar como visitante, ni siquiera un miserable punto.

Renato González no ingresa, Rentería enamora a los comentaristas con su despliegue físico pero no anota y  la hinchada lo sabe, Medina merece el puesto. Hasta Grondona que siempre lo he encontrado limitado pone más asociatividad. Ciani no tiene continuidad y atrás Barrios y Oyarzún tienen ganas pero a puro pelotazo e inocencia no se ganan partidos.

Además nos echaron a Meza, el de San Lorenzo y que es lo mejorcito en defensa.

Pareciera que no queda otra que sufrir, quedan 5 partidos y aunque los descensos por promedio se definen en junio 2015, es importante sumar y dejar de perdonar.

Entrevista a Marco Ciani, jugador San Marcos de Arica

*Nota realizada para el diario «Al Día» de Guatemala.

El “Gato” habla desde Chile

“Me encantaría estar en la selección”

Marco Ciani se confesó con “Al Día” tras vivir una intensa jornada contra el principal aspirante al título de la liga chilena y dice que pretende extender su estancia en pastos extranjeros, aún cuando se mantiene al tanto de la contingencia chapina.

“Entreno con la ilusión de ganarme un espacio acá, hacer mi fútbol y lógicamente ganarme también un lugar en la selección”, señaló el mediocampista alabando el trabajo de Iván Sopegno en el combinado nacional, a quien de paso identifica como su formador.

por Christian Reyes P.
Corresponsal en Chile, Diario «Al Día», Guatemala.
Edición: Luis R. Solares.

Marco CianiSon los primeros minutos del segundo tiempo en el Estadio Nacional de Santiago y el local, la poderosa Universidad de Chile, no puede romper el cerco que le impone San Marcos de Arica, un humilde equipo del extremo norte del país que incluso desperdició varias ocasiones para abrir el marcador. En la banca, un guatemalteco espera su oportunidad para cambiar la historia en una parábola futbolística de David y Goliat, ya que para el puntero vencer a los ariqueños debería ser un mero trámite.

Quien aguarda es Marco Tulio Ciani, el “10” de los nortinos que espera el guiño de Fernando Díaz, el ex técnico de Municipal y actual DT de San Marcos, para saltar al coliseo más importante del fútbol chileno y mostrar lo que sabe. Sin embargo la historia cambia de súbito.

Los azules de la “U” local anotan, luego pese a que el banco -con el “Gato” incluido- hace el calentamiento, se produce la expulsión del arquero y capitán de la visita obligando a reformular lo que queda de partido, por lo que el “Nano” Díaz descarta en su mente la idea de hacer ingresar a Ciani, como suele ocurrir promediando el complemento.

Finalmente el marcador queda 2-0 para Universidad de Chile y el guatemalteco se conforma esta vez con consolar a sus compañeros y saludar al puñado de hinchas que los apoya, algunos de los cuales fueron a darles ánimos previamente en su lugar de concentración, especialmente chapines identificados con su compatriota.

“Eso es lo lindo de esto, que también a uno lo reconocen. Por ahí no he tenido la suerte de darme a conocer más pero creo que es el famoso “acoplamiento” y ya estoy en el proceso final”, nos confiesa Marco Tulio Ciani tras un partido que vivió intensamente, aunque esta vez debió resignarse a verlo sólo como suplente.

“Es lindo que a uno lo reconozcan por lo que uno es, por lo que ha hecho y vengo con toda la ilusión de representar bien a mi país y es lindo que venga gente de allá y te salude”, agrega.

Ciani Arica Facebook personal

 

“Estoy muy bien, muy contento de estar acá, de seguir luchando por lo que quiero. Este era mi sueño desde pequeño, es una liga muy competitiva. En Chile hay jugadores muy buenos y hay que aprender de ellos y seguir creciendo”. (M.Ciani)

 

 

 

Ya de regreso en el hotel y mientras el “Nano” a la distancia toma notas y sus compañeros bajan para la cena, Carlos Ferry, presidente del club pone sus fichas en Ciani y admite que el equipo necesita alguien en cancha que impulse el juego desde medioterreno en adelante y abra los espacios, comparando sus expectativas hacia el “Gato” con las cualidades de un mítico “10” chileno de los años 70, Jaime “Chamaco” Valdés. Sigue leyendo

«Arica, siempre Arica»

Arica, 1984.

Arica, 1984.

Como esos legionarios sin patria, casi un paria. Así podría sentirme por nacer lejos de esta tierra y andar deambulando por diferentes lares de este mundo. Sin embargo, mi arraigo está en el norte, en esa soledad, calma y calidez humana que no se halla en ningún sitio. Ahí adquirí mis primeros recuerdos futboleros y la identificación con un pueblo, su gente y su historia. En mi Arica querido.

Tenía pocos años, podría apostar que aún costaba entenderme hablar, pero ahí estaba, en las gradas del mundialista de calle 18, pasando sinsabores, vibrando con los goles, rabiando con los árbitros y aunque el equipo no jugara, siempre mirando de reojo y con admiración el Carlos Dittborn, soñando con las alegrías que podía darle a toda esa comunidad hermosa y esforzada del extremo norte del país.

En Arica todo tiene historia, sus calles, sus alrededores, su morro y por supuesto su equipo. Pero sus verdaderos tesoros son sus seguidores y las vivencias de sus hinchas. No somos una cantera prodigiosa de estrellas ni contamos con el favor de las grandes empresas ni mucho menos con el de los políticos. Arica siempre ha dependido de sí misma para sobrevivir y no se queja por ello, por el contrario, yace orgullosa de su calidad humana y de la fortaleza interna que prefiere no amargarse con el desdén del centralismo.

Ante Trasandino en Los Andes.

Ante Trasandino en Los Andes.

La gente ariqueña es identificada con su zona, aguerrida pero a la vez -y a diferencia de otros- es amable con el afuerino, casi tímido, como en los pueblos antiguos, cuando la hospitalidad no estaba limitada por las desconfianzas.

Cuando chico, miraba desde el rancho donde vivíamos en Sargento Aldea las torres de iluminación del estadio y en educación física, siempre guardo los recuerdos de mi insulsa humanidad precoz corriendo por los terrenos del Carlos Dittborn. Une vez erré un penal al palo creyéndome uno de los astros de la celeste y casi no pude levantarme por no haber sido digno de fallar a la sombra de ese escenario magno.

Deportes Arica vs. Cobreloa, enero 1986

Deportes Arica vs. Cobreloa, enero 1986

Con mi papá -cuando iba- o cualquiera fuera la compañía, los domingos en la tarde aparecíamos para ver correr a Simaldone, ese crack argentino que aunque muchos veían jubilado, se daba el lujo de irse de farra y pasarse a todo el equipo rival y entrar al arco con la pelota al día siguiente.

Me río de las goleadas que le dábamos a Quintero Unido y sigo maldiciendo por ese karma de no poder ganarle a Calera en casa los sábados en la noche.

No podía creer cuando Arica le ganó una copa  a Colo Colo, estaba en la casa porque era muy chico pero por radio y Telenorte, debió haber sido la primera vez que lloraba por ese equipo. Humilde, sencillo, sin pasarle por encima a nadie, pero como dice una de las directrices de la ciudad, con una lealtad enorme a los colores y el morro en el corazón. Desde ese día viendo esa maltrecha tele en blanco y negro, mi suerte quedó sellada con la «A» gigante.

Donde mi abuelo.

Donde mi abuelo.

Mi abuelito Ricardo me hacía claque con Deportes Arica y mi abuela no era menos fanática. El descenso de 1986 nos dolió, tanto como el fallecimiento del abuelo y después también de un tío que quería mucho. Sería una larga espera antes de volver a la serie de honor del balompié nacional.

La vida me trajo a la capital pero cuando iba a Arica no fallaba, ni en el estadio ni en el cementerio visitando a los míos. Me reía como todos con las locuras del llamado «loco Badulli», sin olvidar que es mi primo lejano, con esos que me crié de niño.

Bajar a tercera división fue un castigo a la falta de compromiso de algunos dirigentes, jugadores y técnicos. No del hincha porque ese siempre estuvo, pero fueron varios los que llegaron a firmar la planilla y echarse en los huevos.

En el amauterismo sufrimos pero ahí seguimos, llenando el estadio, jugando partidos que a veces eran una chacra y con arbitrajes incalificables. Padecimos la tragedia de «Makanaki» Godoy, una promisoria estrella que despuntaba en nuestras filas y que tras un atropello hubo que amputarle un pie, truncado su carrera y los sueños de todo un pueblo. Todo era sombrío hasta que en una tarde fresca de primavera, San Fernando nos soltó la esperada alegría del regreso al profesionalismo.

"Makanaki" Godoy.

«Makanaki» Godoy.

Incluso luego casi vamos por el ascenso a Primera A gracias al eterno «Clavito», pero la tanda de penales nos condenó ante Palestino en el Monumental. Una vez más, gente sin compromiso, casi oportunistas como Raúl Palacios o Cristián Montecinos, no dieron el ancho.

He tenido la oportunidad de ver a Arica en el Carlos Dittborn, en el Santa Laura, el Monumental, en San Fernando, San Felipe, Coquimbo, Los Andes, La Cisterna, La Pintana y otros lares. Siempre es lo mismo, una fiesta donde quiera que el equipo juegue y el resultado, al final es casi una anécdota. Todos comparten un lazo de comunidad, de afectos comunes y de recuerdos felices que unos afortunados siguen manteniendo como vivencias.

Ya en noviembre del año 2012 había llorado como cabro chico con el agónico triunfo que nos dió el ascenso con Concepción. Volvimos al fútbol grande, pero tras 27 años y por cuentos modernos, que promedios, rendimientos y una suerte de binominal del fútbol, pese a no ser últimos, terminamos volviendo a la B.

En San Fernando.

En San Fernando.

Siempre con problemas financieros, tragedias naturales pero el apoyo incondicional de la gente, ahora Marcoleta lo hizo de nuevo, sacando lo mejor de cada jugador con presupuestos que no tenía. Eso ha dicho el inamovible Carlos Ferry en la dirigencia, «hoy todos terminan contrato y aunque no hay dinero, hay que pagar los premios comprometidos de alguna parte porque se lo merecen», ¿qué más se puede agregar?

Ahora de nuevo vamos a luchar contra los reglamentos y el desdén de una ANFP que ni siquiera tuvo la deferencia de enviar un dirigente a entregar ‘algo’ que acreditara la calidad de primer ascendido automático y campeón de la tabla acumulada de la B.  Nada. Y el próximo torneo bajan 3 equipos.

Es una pena que al país, a los dirigentes y a nadie le convenga tener que estar viajando a Arica pero solo queda enviarles las condolencias, porque haremos lo posible por permanecer arriba.

La Cisterna.

La Cisterna.

No será fácil pero lo intentaremos, desde el tablón, la grada, la tribuna, el televisor o la radio. Somos los de siempre, los que no necesitan prender bengalas, hacer desmanes ni matar a nadie para demostrar el amor a nuestros colores. Somos tranquilos pero apasionados por lo nuestro e incluso los que no nacimos ahí tampoco necesitamos demostrarle nada a nadie para sabernos ariqueños.

Chamaco engalanó la celeste, la misma de Moscoso y con la cual Simaldone derrochó talento. Cartes o Rodríguez en puerta, un joven Mauro Meléndez, el flaco Ibarra y la dupla de oro, Cabrera-Ananías. Apenas algunos de los nombres que se me vienen a la cabeza. Ahora habría que agregar a Alegre que nos trajo de vuelta del abismo, al «Clavito» Godoy que sabe como lo queremos en esta tierra, al profe Belmar, a Marcoleta que se inscribió en la historia de los ariqueños y Carrizo, González, Segovia, Piña, Estay y tantos otros que por esas cosas del mercado de pases y la escasez de dinero en Arica, debieron dejar a veces de forma forzada el terruño.

Renato, otro de los que está en la galería de los eternos.

Renato, otro de los que está en la galería de los eternos.

Por eso esta noche da pena acostarse y esperar el día siguiente, porque al menos por ahora, siento también pena por el resto del mundo, esos que creen que se trata de otra madrugada cualquiera y no saben que para los hinchas ariqueños, esta noche es de esas eternas, infinitas, donde el nerviosismo quedó atrás y la satisfacción no nos deja cerrar los ojos.

Arica merece todo y es de esperar que se le de, porque su gente, tiene méritos de sobra, con creces, no sólo porque «mayor es su lealtad», sino porque simplemente… Arica es y siempre será, Arica.

San Marcos de Arica va por su revancha…

Arica sobre Temuco.

Arica sobre Temuco.

Una sonrisa tras un mal rato de aquellos. Pese a tener la «mesa servida» no veníamos bien. De local perdimos 0-3 con el rival directo, Coquimbo Unido, que en sólo 45 minutos del primer lapso nos zamarreó tan fuerte que muchos quedamos sin habla y otros perdieron la fe.

Pero a la semana siguiente la decepción siguió sumando. Coquimbo pasó arriba en la tabla general, esa que da un cupo directo a Primera A ya que cuando estábamos listos para asegurar la punta, Magallanes en Maipú, nos robó un empate a última hora.

Ahora con Temuco de local la cosa era cuesta arriba ya que Coquimbo recibía a Barnechea en el Sánchez Rumoroso, pero la sorpresa fue grande porque los capitalinos, le encajaron una dolorosa derrota a domicilio a los piratas.

Tal como en las mejores ligas europeas, la presión y el suspenso llegan hasta la última fecha. Arica ganó a Temuco en casa este sábado 3-0 y quedó con la primera opción de volver al fútbol grande, ese que le dio la espalda el año pasado consintiéndolo solo por seis meses tras 28 años en el ascenso.

En la B nacional, a Arica (60 ptos en tabla acumulada) le espera Concepción este domingo a las 15:30 horas en Chillán y luego el miércoles 14 enfrentará a Lota en el mundialista de calle 18. Todo dependerá de lo que ocurra con Coquimbo (58 ptos tabla acumulada), que jugará en simultáneo este domingo de local con Curicó Unido para ver si hay definiciones o habrá que esperar la última fecha cuando los aurinegros viajen a Santiago a jugar con el «Chago» del conocido de la celestes, el «clavito» Godoy.

Si Arica empata y Coquimbo gana, el suspenso para saber quién ascenderá se trasladará hasta el miércoles 14 de mayo, ya que ambos cuadros quedarían con 61 puntos a tan sólo una fecha para que concluya el torneo.

En la pega viendo el partido con Magallanes el pasado domingo 27.

En la pega viendo el partido con Magallanes el pasado domingo 27.

El artículo 95 de las bases del torneo (by ANFP) dicen:

1) En las tablas mencionadas en los artículos anteriores, la ubicación de cada club, se
ordenará de acuerdo a los siguientes criterios:

a) Mayor cantidad de puntos obtenidos; en caso de igualdad;

b) Mejor diferencia entre los goles marcados y recibidos; en caso de igualdad; (Arica +14, Coquimbo +3)

c) Mayor cantidad de partidos ganados; en caso de igualdad; (Arica 16 pg, Coquimbo 17)

d) Mayor cantidad de goles convertidos; en caso de igualdad; (Arica 50, Coquimbo 51)

e) Mayor cantidad de goles de visita marcados; en caso de igualdad;

f) Menor cantidad de tarjetas rojas recibidas; en caso de igualdad;

g) Menor cantidad de tarjetas amarillas recibidas; en caso de igualdad;

h) Sorteo.

De salir airosos, la tarea no es sencilla: En mayo del 2015 bajarán 3 equipos de Primera A por el inefable coeficiente de rendimiento y subirá apenas uno de Primera B para igualar el número de equipos de ambas series a 16.

Siempre el bendito reglamento nos perjudica, pero ahí estaremos, haciendo el aguante.

Michael Ríos y su particular vergüenza

MRIOS

Ríos, la mala memoria.

*Así como en Santa Laura las dudas recayeron sobre Emiliano Vecchio, en el norte las acusaciones de incentivos corrieron a diestra y siniestra. Michael Ríos deshonró sin asco su pasado celeste.

Es cierto que Chile es un país que se caracteriza por la mala memoria, sino pregúntenle a Michael Ríos. Si bien el volante hace rato no era santo de la devoción de los ariqueños, ya que pasó por las filas del archirrival, Iquique, no dudó en cuestionar la honorabilidad y ética profesional de los Bravos del Morro.

El ahora cruzado aseguró: “Me da vergüenza que Arica haya jugado así. Parecía el Barcelona. Jugaron por plata. Deben jugar por su sueldo y no por la plata de otros». Y eso que fueron sólo algunas de las cosas el ex ‘7’ de la celeste dijo en los pasillos del mundialista de calle 18.

Quien le respondió fue el arquero y capitán de San Marcos, Pedro Carrizo: “Que no hable, porque fue él quien nos llamó durante la semana (…)». Puf!, luego de aquello se pidieron las acostumbradas pruebas sobre los dichos que de seguro sólo quedarán en eso.

Y mientras Cristián Álvarez, frustrado, ninguneaba al central argentino de Arica, Daniel Mustafa, Carrizo guardó otra frase para los de la franja: «Si Católica tuviera más humildad no saldría siempre segunda».

Michael Ríos sangró por la herida y la anemia le afectó la memoria. Esa donde pensamos aún quedaba algo de cariño por las instituciones que se defiende, como lo exijen las hinchadas, especialmente la ariqueña. Su rendimiento en Arica lo llevó al Morning con el sueldo más alto del plantel, luego a Iquique y a Católica. Hay cosas que debieran recordarse o respetarse al menos, al margen de la calentura.

San Marcos, al garete.

Caos celeste.

Caos celeste.

Debate en Facebook sobre la continuidad del cuerpo técnico iniciado nada menos que por la cabeza dirigencial, una decena de jugadores entrenando separados del plantel y rumores de castigo e indisciplinas, diferencias dentro del camarín, futbolistas encarando a la prensa, aclaraciones, etc.

Mi humilde opinión de hincha en la web del santo…

Un lamentable circo de responsabilidades compartidas entre todos los estamentos. Una falta de respeto para un escenario largamente añorado por casi tres décadas. Un grito en la oscuridad, un saludo a la bandera contra una ANFP a la que simplemente por finanzas no le conviene que Arica permanezca en la división de honor.

Los perjudicados, los hinchas. Otros cobrarán y se irán. Nosotros seguiremos con el sueño de un equipo que al margen de la división en que esté, moje la camiseta.

Este paréntesis con los llamados grandes del fútbol chileno, apenas una breve recompensa para un pueblo que ha sufrido tanto.

b.

Así, colistas condenados en la caprichosa tabla de promedios (en la tabla real las posiciones son: último Cobresal 2 ptos, penúltimo Iquique 5, después Arica 7 ptos = baja Arica ¿?), ahora viene Colo Colo, algo herido pero la vara no es muy alta para un santo nortino que juega sin conducción ni contundencia en ofensiva. Todo está en contra de los locales, incluso el estadio en reparaciones y con capacidad limitada. Habrá que ver, y por qué no, rezar.