Acción en cámara lenta.
Aunque resulta muy cómodo caer en el facilismo de cuestionar la calidad de las interpretaciones y otras conjeturas, «Escape plan» (2013) tiene algunos brillos que al menos hay que reconocerle.
Fuera de darle en gusto culpable a quienes pedían ver juntos como exclusivos protagónicos a la dupla Stallone – Scharzenegger, la dirección de Mikael Håfström sorprende por su frialdad para entrar en escena con la historia. Un modo frío, lejano y muy poco atractivo. Casi de cine mudo que perjudica en demasía al film.
En contrapartida, este bajo balance inicial hace que todo lo que venga pueda sumar, no así Stallone que actúa toda la cinta con una horizontalidad que adormece. ‘Governeitor’ en cambio tiene algo más de humor en su adn y al menos en una escena, tiene una representación actoral digna.
El elenco se suma al ascenso tardío de la película que pareciera la fusión de muchas otras, pero que reiteramos, sube tras un inicio pobrísimo y que le quita el piso, tornándose con los minutos en al menos, levemente interesante.
No cabe duda que no es una pieza de joyería fílmica, pero es un ejercicio inútil pedir más de cintas que tienen otros objetivos.
Predecible y todo, será disfrutada por los fans de la vieja escuela, quienes de todas maneras deberán admitir que a ratos no saben si los gestos de dolor de los musculosos de otrora, son por requerimientos del guión o por reumatismo, porque ya no están para estos trotes. Para el resto, una tortura de casi dos horas.
Siendo generosos, regular. De nada sube su nivel a medio por algunos tintes interesantes de la trama. 😐
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EL CITÉ DE BUYINSKI 